Es inevitable. Pasa con los cosméticos como pasa con los medicamentos y con los alimentos envasados. Algunos de éstos quedan arrinconados en un lugar de la nevera, tapados por latas, tuppers y otros paquetes que los ocultan a nuestra vista. Cuando los vemos, comprobamos con fastidio que esos productos (piensa en el yogurt, en unas lonchas de embutido, en un fraso de salsa preparada) ya están caducados. Lógicamente, y por mucho que algún ex-ministro haya sostenido alguna vez lo contrario, lo más adecuado y recomendable cuando uno encuentra un producto alimenticio caducado es lanzar ese producto a la basura. Lo mismo haríamos, sin dudarlo ni un instante, con los medicamentos. ¿Quién con un mínimo sentido de la responsabilidad consumiría un ibuprofeno, un paracetamol o un antibiótico caducado? Nadie.

Los cosméticos, al igual que los alimentos y las medicinas, también caducan. Caducan las barras de labios y caducan las bases de maquillaje, las cremas hidratantes y las máscaras de pestañas. Su fecha de caducidad, sin embargo, no es tan estricta como lo es en el caso de los alimentos. El producto cosmético se conservará útil para cumplir su función correctamente y con garantías para la piel dependiendo de la higiene, del clima y de la calidad del fabricante. Los climas calientes y húmedos aceleran la caducidad de los productos cosméticos, al igual que sucede con los cambios bruscos de temperatura. También caducarán antes aquellos productos cosméticos que hayan sido tocados con los dedos que aquéllos que hayan sido aplicados sirviéndonos del uso de una espátula, brocha, etc. Los productos fluidos y grasos caducan antes que otro tipo de productos cosméticos.

Constatar el color y la textura del cosmético deberá servirnos para determinar si ese cosmético sigue siéndonos útil o si, por el contrario, puede considerarse un cosmético caducado y, por tanto, desechable. Hay que tener siempre presente que la aplicación de un cosmético caducado puede provocarnos algún tipo de reacción alérgica y ésta, por leve que sea, siempre resultará molesta. Esto, que en las cremas es relativamente importante, tiene capital importancia cuando el cosmético a usar debe tocar, por ejemplo, zonas aledañas a los ojos. Una máscara de pestañas caducada podría ocasionar una irritación, una conjuntivitis o una infección ocular de consecuencias imprevisibles. Nunca utilices una máscara de pestañas que tenga apariencia de reseca ni un lápiz labial que presente también ese aspecto reseco y quebradizo. En el caso de cremas y pomadas, observa si han experimentado algún cambio de color (presentando una tonalidad más oscura o más clara) o si su textura se ha vuelto más acuosa. Si encuentras una capa líquida sobre la crema arroja ésta a la basura porque está caducada.

Hay muchas marcas que, en sus envases, incorporan un icono que simboliza el tiempo aproximado al que caducará dicho cosmético una vez que haya sido abierto. Ese símbolo (que es un envase abierto) incorpora un número y la letra “M”. El número indicará el número de meses necesarios para que un cosmético caduque una vez que haya sido abierto.

Si el producto no ha sido abierto, lo normal es considerarlo caducado cuando hayan pasado tres años de su fecha de fabricación.

Atendiendo a todo esto podemos preguntarnos…

¿Cuánto dura aproximadamente cada cosmético?

Las bases de maquillaje y correctores duran alrededor de año y medio. En cualquier caso, es sencillo comprobar si la base de maquillaje ha caducado. Será así cuando pigmentación y aceite hayan dejado de mostrarse como algo homogéneo para empezar a separarse.

Los labiales tienen una larga duración siempre que hayan sido tratados correctamente. Si los has utilizado mientras tenías una infección en los labios o si han cambiado de olor o color, tíralos.

Las sombras de ojos y los coloretes en polvo tienen una duración que puede rondar los dos años. Ese tiempo se reduce sensiblemente cuando la sombra es en crema, gel, etc. Aplicándola con el dedo, la sombra de ojos tiene una caducidad que ronda los seis meses.

Los polvos sueltos y los polvos bronceadores tienen una larga duración. La caducidad de estos cosméticos podría considerarse de un plazo de tres años.

Las máscaras de pestañas tienen una duración corta, de entre tres y seis meses. Aprovéchala al máximo y cámbiala en cuanto empiece a resecarse o haya cambiado su textura. No la utilices si tiene grumos.

Los eyeliners tipo lápiz pueden durar mucho. Cada vez que les sacas puntas los renuevas. Si, por el contrario, usas un delineador líquido o en gel, deberás cambiarlo cuando haya transcurrido un tiempo desde su apertura que oscilará entre los seis y los doce meses.

El correcto uso de estos cosméticos te permitirá alargar su fecha de caducidad. También ayudará a ello el correcto cuidado de las brochas, espátulas, pinceles, etc. con los que te apliques dichos cosméticos. Limpiar las brochas tras cada uso reducirá el riesgo de infecciones.

Para mantener correctamente los cosméticos y alargar su fecha de caducidad se recomienda también utilizar esponjitas para base de maquillaje de un solo uso. Estas esponjitas acumulan muchas bacterias y el uso reiterado de una misma esponja afectaría negativamente al mantenimiento del cosmético y a la duración de su vida útil.