¿El verano se va y no te has puesto morena? No te preocupes. La solución la tienes al alcance de la mano. Los polvos bronceadores darán a tu piel ese tono de bronceado tan favorecedor y, al mismo tiempo, de apariencia tan natural que estás buscando.

Los polvos de sol que comercializan actualmente las principales marcas de cosmética están realizados a partir de fórmulas que favorecen esa naturalidad que evita que el rostro adquiera un tono artificial.

Al mismo tiempo, te ayudan a cuidar de tu piel, pues para estar morena no necesitarás exponerte de forma intensa al sol. Después de todo, la intensa exposición al sol acaba provocando la aparición de manchas solares y lentigos en un cutis que envejece más rápido.

En este artículo vamos a explicarte cómo aplicar polvos de sol y te vamos a dar una serie de consejos básicos para que encuentres el bronceador maquillaje que mejor se adapte a las características de tu piel.

Polvos bronceadores

¿Cómo escoger polvos bronceadores?

Hay muchas marcas de cosméticos que comercializan polvos bronceadores. Tus opciones a la hora de comprar uno son, pues, muy variadas. Los hay satinados, brillos, mate… Pero… ¿cuál es el mejor polvo bronceador para tu piel?

Lo primero que tienes que tener en cuenta al elegir un polvo bronceador es que debes escoger un tono adecuado para tu color de piel. Si escoges un polvo que sea mucho más oscuro que ella perderás ese efecto de naturalidad que siempre va asociado a la verdadera belleza y a la elegancia.

Para dar la apariencia de un bronceado natural lo mejor es escoger un producto satinado. Eso nos permitirá mantener en nuestro cutis un efecto luminoso pero sin caer en el pecado de la saturación.

Las personas que tengan la piel seca o apagada deben evitar el polvo de sol con acabado mate. El bronzer, un producto con partículas doradas y nacaradas que confieren al cutis un aspecto cálido y brillante, es una buena opción.

Por su parte, si lo que se persigue al aplicar un maquillaje bronceador es un efecto contouring, los productos mate son los más indicados para conseguirlo.

Tenido esto en cuenta, vamos a ver en el siguiente apartado cómo aplicar polvo bronceador.

Polvos de sol

¿Cómo aplicar polvos de sol?

Antes de ponerse el polvo bronceador, al igual que antes de ponerse cualquier tipo de maquillaje, es necesario haber limpiado la epidermis convenientemente. Para ello, nada mejor que una crema hidratante. Una vez aplicada sobre tu rostro, espera diez minutos antes de aplicar la base.

La base de maquillaje es fundamental para conseguir que, después, resalte el bronceador. Puedes aplicar una base un tono más oscuro que el de tu piel, pero te arriesgas a que después el maquillaje te hagan parecer antinaturalmente morena. Si aplicas una base con el tono de tu piel conseguirás evitar ese problema.

Elegir una brocha de maquillaje adecuada, de un tamaño intermedio o grande y de pelo suave, es el siguiente paso que deberás dar antes de aplicarte el producto.

Ahora ha llegado la forma de aplicarlo. ¿Cómo hacerlo? Tomando el producto con un solo toque, acariciando apenas la cara y dibujando un tres sobre cada uno de sus lados.

Es decir: iniciando la aplicación en la parte superior de la frente, siguiendo por las mejillas y bajando finalmente hacia la mandíbula hasta llegar a la parte frontal de la barbilla. Llegada ahí, deberás difuminar el polvo cuidadosamente hacia el cuello. Si se desea, se puede dar algún pequeño y leve toque en la nariz.

Esta técnica de maquillaje recibe el nombre de sun stripping o sun kissed, que podría traducirse por algo así como “besada por el sol”.

Realizado esto, si lo deseas, sella tu bronceado artificial fijándolo con una ligera capa de polvo traslúcido.

El mejor polvo bronceador

¿Qué no hacer al aplicar polvo bronceador?

Dados ya los consejos básicos sobre cómo usar el polvo bronceador en la cara, vamos a ver qué es lo que no debes hacer nunca a la hora de buscar un bronceado con maquillaje.

Para empezar, no debes olvidarte de aplicar también la base de maquillaje en el cuello. Esto debe hacerse extensible al escote y a los hombros si luces en vestido o prenda que muestre esas partes de tu cuerpo.

No debes buscar, tampoco, un tono demasiado oscuro y diferente al de tu cutis. No te favorecerá. Recuerda siempre que el mejor maquillaje es aquél que parece más natural.

Tampoco debes usar, al ponerte este tipo de productos, brochas pequeñas. Una de este tipo marca demasiado el trazo por el lugar por donde pasa y resulta muy complicado difuminar ese trazo después. Con una brocha grande, por el contrario, se consigue un difuminado de una forma mucho más sencilla, natural y efectiva.

Las personas de piel extremadamente pálida deberían renunciar a utilizar este tipo de productos, pues el resultado al aplicarlos sobre ese tipo de pieles es demasiado artificial y le dan un tono anaranjado. En estos casos es preferible usar un toque de colorete de color rosado o melocotón.

Bronzer