Por mucho que pueda decirse que qué bien le sientan las canas a Richard Gere, lo cierto es que la aparición de la primera cana en el cabello de un hombre y, sobre todo, de una mujer, no se suele vivir, precisamente, como una fiesta. Y es que la cana delata algo que, pese a ser inevitable, no resulta demasiado agradable: el paso del tiempo y, con él, el hecho de envejecer. Por eso quien más quien menos procura prevenir la aparición de las canas y, en caso de aparecer éstas, intenta disimularlas. En este artículo de El Blog de CDNPerfumes vamos a centrar nuestra atención en cómo prevenir las canas.

Antes de centrarnos en la prevención de las canas vamos a mirar a qué es debida su aparición y cuántos tipos de canas o de canicies diferentes hay.

Motivos y tipos de canas

La decoloración del cabello que convierte un pelo en una cana es debida a la disminución en dicho cabello de la melanina, una sustancia que, entre otras cosas, determina el color de nuestro cabello. La disminución de la melanina se debe, según apuntan unos estudios, a la ausencia de la MSR, una enzima que reduce la cantidad de peróxido de hidrógeno en el cabello. El peróxido de hidrógeno (agua oxigenada) entorpece el funcionamiento de una serie de enzimas que participan de forma fundamental en el proceso de formación de la melanina. Al ser entorpecida su función, la melanina deja de producirse y el cabello se agrisa o se vuelve completamente blanco.

La disminución de la melanina puede deberse a diversas causas. Entre ellas destacaríamos, primeramente, el envejecimiento natural de la persona. En gran medida, la cana es fruto de la edad. Al envejecer, las canas aparecen, aunque lo cierto es que en no todos los grupos étnicos las canas aparecen en la misma franja vital. Los primeros seres humanos en volverse canosos son los pertenecientes a la raza caucásica. Los caucásicos suelen ver aparecer las primeras canas en su cabello alrededor de los 30 años de edad. Los asiáticos, por su parte, suelen empezar a tener canas cuando rondan la cuarentena. El grupo étnico que tarda más en ver aparecer las canas en su cabello es el de los negros. Las personas de raza negra conservan el color de su cabello hasta pasada la cuarentena.

Otros de los motivos que provocan la disminución de la melanina en el cabello y la aparición, por tanto, de las canas, es el de la herencia genética. Junto a él, el estrés, una mala alimentación, alguna enfermedad como el hipotiroidismo o la anemia perniciosa, así como el consumo abusivo de alcohol o tabaco, pueden provocar la aparición de canas.

Atendiendo a todo esto, podemos distinguir cuatro tipos de canicies:

  • Canicie fisiológica. Este tipo de cana es fruto de la senescencia o, lo que es lo mismo, del envejecimiento natural de la persona. En este tipo de canicie, las canas empiezan a apreciarse en las sienes para, a continuación, empezar a aparecer en la parte posterior de la cabeza.
  • Canicie prematura. Este tipo de cana puede aparecer por diversos factores. Se dice que las canas son prematuras cuando aparecen en personas de raza caucásica que aún no han cumplido los 20 o en personas de raza negra que no hayan cumplido todavía los 30.
  • Poliosis. Este tipo de canas aparece de forma muy localizada, afectando a mechones de pelos. Puede aparecer, por ejemplo, en cejas o pestañas. Habitualmente este tipo de canicie tiene un origen genético-hereditario.
  • Canicie anular. Este tipo de canicie se caracteriza porque los cabellos blancos se diseminan, por toda la cabeza, de forma discontinua. En algunos casos, estos cabellos blancos pueden presentarse en mechones o grupos.

Consejos para prevenir las canas

Una vez distinguidos los distintos tipos de canas y conociendo las diferentes causas que pueden provocar la aparición de las mismas, vamos a dar una serie de consejos para prevenir las canas.

El primer consejo, básico para prevenir las canas, es mantener una dieta sana y equilibrada. Es decir: alimentarse bien. Y alimentarse bien es proporcionar a nuestro organismo todos los nutrientes que él necesita para funcionar bien. Entre todos esos nutrientes, las vitaminas, y en especial la vitamina B12, son fundamentales para la salud capilar. Para incorporar las vitaminas a nuestro organismo hay que consumir pescado, huevos, pollo y carnes de res, así como frutas, verduras, lácteos y frutos secos. Si con la dieta habitual no se consiguiera alcanzar la dosis necesaria de vitaminas, se debería valorar la posibilidad de tomar suplementos nutricionales. Para prevenir las canas mediante la alimentación es necesario, también, ingerir mucha agua y reducir al máximo el consumo de sal y de alimentos preparados, ya que tanto una como los otros favorecen la aparición de canas.

El segundo consejo para prevenir las canas es reducir el nivel de estrés. Para ello es bueno la práctica habitual de disciplinas como el Yoga o el Taichí. La práctica de técnicas de relajación fundamentadas en la respiración consciente también sirve para reducir el estrés y, con ello, para prevenir las canas.

El tercer consejo a tener en cuenta para retrasar la aparición de las canas tiene que ver, directamente, con el cuidado capilar. Cuidar bien el cabello es fundamental para prevenir las canas. Para ello es necesario elegir bien los productos que utilizamos, realizar masajes del cuero cabelludo (se ha demostrado que las canas aparecen primeramente en las sienes porque ahí el riego sanguíneo es menor) y evitar el calor excesivo tanto al lavarse el cabello (no es bueno lavarse el pelo con agua caliente) como al secarlo con un secador o al utilizar las planchas o tenacillas. Si utilizamos habitualmente estos aparatos debemos, aparte de regular la temperatura, utilizar algún producto capilar protector del calor.

Finalmente, si queremos prevenir las canas debemos saber de el efecto dañino que el tabaco tiene también para la salud capilar. Hay estudios que han demostrado que la persona fumadora tiene cuatro veces más posibilidades de tener canas que la persona que no lo es. Reducir al máximo o, mejor aún, erradicar absolutamente el consumo de tabaco es una buena medida para prevenir la aparición de las canas.