El arte de los fabricantes de productos de imitación consiste en hacer dudar al consumidor sobre si el producto que compra es el original o no. Esto, que sirve para todo tipo de producto, sirve también para los perfumes. Los fabricantes de perfumes falsos han perfeccionado sus técnicas de imitación hasta el punto de crear fragancias que nos hacen dudar sobre su autenticidad o su falsedad. Esto, no hace falta decirlo, causa un grave perjuicio a la industria perfumista y al sector de la venta de fragancias originales en general. No hace demasiados meses que en los medios de comunicación de nuestro país se reflejó que, según datos que maneja la Oficina de Propiedad Intelectual de la Unión Europea, el sector de la perfumería y la cosmética perdía en España un 17% de sus ventas anuales debido a la competencia desleal de los fabricantes de perfumes de imitación.

Diarios como El Mundo se hicieron eco de este problema y también de cómo los perfumes falsos podían suponer un peligro para la salud de quien los utilizara. Eso, al menos, era lo que se desprendía de unos análisis de laboratorio realizados por al Asociación Nacional de Perfumería y Cosmética. Gracias a dicho estudio pudo saberse:

  • Que, frente a los 80 componentes que puede tener un perfume original, un perfume falso puede tener apenas 20 ó 25.
  • Que los perfumes falsos utilizan una gran cantidad de agua como base.
  • Que los perfumes falsos utilizan etanol industrial o de baja pureza como disolvente.
  • Que algunos perfumes falsos poseen en su formulación ingredientes prohibidos como el etilenglicol.
  • Que los perfumes falsos carecen de protección UV, lo que facilita que puedan fotodegradarse y, por tanto, puedan provocar reacciones alérgicas.

En definitiva, lo que el análisis mencionado venía a plasmar es que los ingredientes utilizados por los fabricantes de perfumes falsos no respetan las medidas de seguridad que establece el Reglamento Europeo de Cosméticos. Y es que la inmensa mayoría de los perfumes falsos se fabrican en instalaciones fuera de control de las autoridades sanitarias.

El cliente potencial de este tipo de productos, pues, debe saber distinguir un perfume original de un perfume falso y tener siempre presente que no es lo mismo un perfume falso que un perfume de imitación. El perfume falso es mucho más dañino que el de imitación. El perfume de imitación, comúnmente, intenta emular el aroma del perfume original y lo hace ajustándose a la regulación legal y a las correspondientes evaluaciones de seguridad. El fabricante del perfume de imitación se identifica claramente y expone claramente lo que está vendiendo: una imitación.

El fabricante de perfumes falsos, por su parte, no hace eso. El fabricante de perfumes falsos intenta engañar al consumidor, intenta hacerle creer que lo que está comprando es el perfume original. Por eso el comprador potencial de un perfume debe saber distinguir entre un perfume original y un perfume falso. Para hacerlo deberá prestar atención a los siguientes aspectos:

  • La fragancia y el color. Las mejores marcas perfumistas utilizan colores pálidos a la hora de realizar sus perfumes. Quien se encuentre ante un perfume de color vivo podrá dudar de su autenticidad. El olor del perfume falso, por otro lado, dura poco tiempo. El perfume original acostumbra a durar un tiempo que nunca es corto.
  • La prueba de las burbujas. Una buena manera de distinguir un perfume original de un perfume falso es agitar el frasco. Si se forman pequeñas burbujas que desaparecen al instante, el perfume del frasco es original. Si no lo hacen, ese perfume es falso.
  • El frasco. En perfumería, el frasco es fundamental. Las industrias perfumistas buscan no sólo que el consumidor relacione inmediatamente un tipo de frasco con su marca o su creación, también persiguen que el frasco cumpla con la que, en definitiva, es su tarea fundamental: conservar en perfecto estado la fragancia que contiene para que ésta no se degrade ni pierda cualidades. Así, el frasco de un perfume original de calidad acostumbra a ser un frasco elaborado con un cristal también de calidad, liso y de una única pieza. ¿Por qué preferentemente de una pieza? Porque así se evita el uso de pegamentos que puedan contaminar el perfume. Un detalle que en ocasiones ayuda a distinguir un perfume original de uno falso es la longitud del tubo dispensador del mismo. El del perfume falso acostumbra a ser curvado porque, comúnmente, es más largo que el frasco.
  • La caja. El packaging o empaquetado es fundamental en el negocio perfumista. Toda marca intenta crear un producto que, colocado en un expositor de una perfumería, sea fácilmente reconocible. Por eso invierte toda su inventiva en crear una caja original y de calidad. Para ello se emplean materiales de primera calidad. Un fabricante de perfumes falsos no utilizará nunca para empaquetar sus productos un cartón de la calidad y el gramaje que utilizaría para empaquetar los suyos un fabricante de perfumes originales. Las protecciones del interior de la caja, por otro lado, no serán, tampoco, de la misma calidad en los perfumes falsos que en los perfumes originales. En los perfumes originales, los diseñadores del packaging se preocupan de crear una estructura interna que, hecha de cartón de alta calidad (blanco y no grisáceo), sujeta bien el frasco e impide que se mueva dentro de la caja durante su transporte.
  • El celofán. En los perfumes originales, el plástico que envuelve la caja presenta un plegado perfecto. Ese plástico o celofán, además, queda adherido de una manera fina al embalaje. Es difícil que en las falsificaciones de perfumes el celofán presente ese aspecto perfecto, sin dobleces, y ese grado de adherencia a la caja.
  • El número de serie. Todo perfume original posee un número de serie y dicho número de serie debe aparecer grabado en la parte inferior del frasco. Ese número, además, debe coincidir con el que aparece, grabado o impreso, en el fondo de la caja. En los perfumes falsos, ese número acostumbra a estar pegado.

Esperamos que estos consejos puedan servirte para distinguir los perfumes originales de los perfumes falsos. En cualquier caso, si deseas adquirir un perfume original siempre puedes hacerlo recurriendo a una perfumería física y online de confianza. Nosotros ponemos nuestro catálogo de perfumes a tu disposición para que en él puedas adquirir un perfume original a un precio excepcional y de una manera sencilla y segura. En el catálogo de perfumes para mujer, hombre y niños de CDNPerfumes hemos reunido para ti una magnífica selección de los principales perfumes de las mejores marcas.