¿Cuántas veces hemos señalado en nuestros artículos que uno de los pasos fundamentales a la hora de maquillarse es escoger bien la base? Que se ajuste al color de tu piel, se suele decir. Pero esto, que en apariencia puede parecer muy sencillo, no lo es tanto. Para saber escoger aquella base de maquillaje que mejor se ajusta al color de nuestra piel es necesario que comprendamos primero a qué nos referimos cuando hablamos de tono y subtono de maquillaje. En este artículo vamos a aclararte dichos conceptos y te vamos a ayudar a buscar la base perfecta para tu cutis.
¿Qué es tono y qué subtono?
Cuando en maquillaje hablamos del concepto tono estamos hablando de una cualidad del color según su grado de intensidad o según si posee características de otro color. Dentro del abanico de los tonos de la piel entran desde la piel más clara a la más bronceada. A la hora de realizar una tipología de los tonos podemos distinguir entre tonos claros, medios y oscuros.
El subtono de la piel, por su parte, aunque pueda parecer algo extraño, es el que, finalmente, determina el tono de la piel y el tipo de base que debemos escoger. Y es que, así como el tono sí puede cambiar (podemos estar más o menos bronceadas dependiendo de la época del año en que nos encontremos y de nuestra mayor o menor exposición al sol), el subtono nunca cambia. Los grados de ésto son fríos, neutros y cálidos y determinan la apariencia del tono de nuestra piel.
Estos dos conceptos deben ser tenidos muy en cuenta a la hora de escoger la base de maquillaje. Si la escogemos bien, nuestro piel quedará bella e impecable. Si la escogemos mal, puede dar un aspecto anaranjado o cuarteado.
Trucos para conocer nuestro subtono de piel
Una vez tenemos claros los conceptos de tono y de subtono, es importante saber cuál es el subtono de nuestra piel para, en base a ello, escoger nuestro maquillaje.
Para saber cuál es nuestro subtono de piel debemos prestar atención a una serie de detalles. Uno de esos detalles que pueden servirnos es el del color de las venas de nuestras muñecas. El subtono de nuestra piel será cálido si esas venas presentan un aspecto verdoso. Si, por el contrario, lo tienen entre azulado y violeta, nuestro subtono sería frío.
Las pieles de subtono frío son más proclives a quemarse cuando se exponen al sol, sin llegar a alcanzar un bonito bronceado. En ellas, además, se notan más las imperfecciones. Las de subtono cálido, por su parte, se broncean más fácilmente y son más fáciles de tratar cuando lo que se desea es tapar determinadas imperfecciones. Eso sí: las personas con este subtono de piel acostumbran a tener más ojeras que el resto.
Otro truco para conocer el subtono de nuestra piel consiste en prestar atención a los colores del rostro. Para ello, debemos recurrir a la ayuda de accesorios de adorno dorados y plateados. ¿Cuáles te favorecen más? ¿Los dorados? Pues entonces tu piel tiene un subtono cálido. Será frío en el caso de que te favorezcan más los adornos plateados.
En caso de que tengas muchas dudas en este sentido, puedes dar por hecho que el subtono de tu piel es neutro.
La elección de la base de maquillaje
Una vez conocido el tono y el subtono de la piel podemos ya escoger una base de maquillaje de un tono o un subtono determinados.
Así, para las pieles claras buscaremos tonos rosados que ayudarán a dar a las mismas un tono saludable. Para maquillar las pieles de tono medio lo más habitual es utilizar tonos beige. A las pieles oscuras, por su parte, les sienta muy bien el dorado, ya que este color ayuda a contrarrestar su aspecto apagado aportándoles luminosidad.
Atendiendo a los tipos de subtonos de la piel, las colores de maquillaje más idóneos serían los siguientes:
- Para pieles de subtono frío: colores rojizos, azulados, rosados, etc. Este tipo de piel plantea un problema fundamental que debe ser corregido con el maquillaje: en ella se notan más las imperfecciones y suele quemarse más al exponerse al sol.
- Para pieles de subtono cálido. En este caso se recomienda usar colores dorados y amarillos.
- Para pieles de subtono neutro. Para pieles de este tipo se recomienda el uso de maquillajes de tipo neutro que combinen pigmentaciones rosáceas con pigmentaciones de color beige. En este caso hay que prestar atención a la intensidad del subtono. Si es muy baja, pueden utilizarse maquillajes rosados como en el caso de las personas de subtono frío. Si, por el contrario, la intensidad es muy alta, se puede buscar una base de maquillaje más cálida, es decir, más cercana a los dorados y amarillos.
Una buena manera de saber si se ha acertado con la base de maquillaje escogida es probarla en la zona del escote. El color escogido será el correcto si, al aplicarlo sobre esa zona de la piel desaparece el tono del mismo. Otra forma de acertar al escoger la base de maquillaje es coger medio tono por debajo del de nuestra piel. Si actuamos así, siempre podemos ajustar con posterioridad el tono del mismo gracias al uso de colorete y polvos bronceadores.
